Aprender de los campeones
eBook - ePub

Aprender de los campeones

Pep Marí Cortés

Share book
  1. 142 pages
  2. Spanish
  3. ePUB (mobile friendly)
  4. Available on iOS & Android
eBook - ePub

Aprender de los campeones

Pep Marí Cortés

Book details
Book preview
Table of contents
Citations

About This Book

Para ser el mejor cirujano, pastelero, policía o profesor hace falta lo mismo que para ser el mejor futbolista. Para demostrar su tesis Pep Marí parte de numerosos ejemplos reales de deportistas de élite que ha ido recopilando a lo largo de 23 años de ejercicio profesional.

Frequently asked questions

How do I cancel my subscription?
Simply head over to the account section in settings and click on “Cancel Subscription” - it’s as simple as that. After you cancel, your membership will stay active for the remainder of the time you’ve paid for. Learn more here.
Can/how do I download books?
At the moment all of our mobile-responsive ePub books are available to download via the app. Most of our PDFs are also available to download and we're working on making the final remaining ones downloadable now. Learn more here.
What is the difference between the pricing plans?
Both plans give you full access to the library and all of Perlego’s features. The only differences are the price and subscription period: With the annual plan you’ll save around 30% compared to 12 months on the monthly plan.
What is Perlego?
We are an online textbook subscription service, where you can get access to an entire online library for less than the price of a single book per month. With over 1 million books across 1000+ topics, we’ve got you covered! Learn more here.
Do you support text-to-speech?
Look out for the read-aloud symbol on your next book to see if you can listen to it. The read-aloud tool reads text aloud for you, highlighting the text as it is being read. You can pause it, speed it up and slow it down. Learn more here.
Is Aprender de los campeones an online PDF/ePUB?
Yes, you can access Aprender de los campeones by Pep Marí Cortés in PDF and/or ePUB format, as well as other popular books in Desarrollo personal & Éxito personal. We have over one million books available in our catalogue for you to explore.

Information

Publisher
Plataforma
Year
2011
ISBN
9788415577249
1.
La pirámide
Un modelo es una forma de interpretar la realidad. En el Departamento de Psicología del Deporte donde desarrollo mi actividad profesional, disponemos de un modelo para ordenar los aspectos psicológicos que participan en el rendimiento. Nuestro modelo de trabajo tiene forma de pirámide y está formado por cuatro niveles. Cada nivel corresponde a un requisito psicológico necesario para alcanzar el máximo rendimiento (deportivo, en nuestro caso). Te lo presento.
En la base de la pirámide tenemos el «poder aprender». Hace referencia a la personalidad del deportista y a su entorno inmediato (familia, amigos, pareja, trabajo, etc.). La manera de ser del deportista y sus circunstancias deben permitirle poder aprender, de lo contrario difícilmente llegará a rendir en la medida de sus posibilidades. Si tuviera que resumir este apartado con una sola frase utilizaría la siguiente cita de Pacho Maturana, entrenador de fútbol colombiano: «Se juega como se vive».
¿Quieres que tu rendimiento sea regular, consistente y estable? Pues primero debes conseguir que tu estado de ánimo sea regular, consistente y estable. Si normalmente estás contento por la mañana, triste por la tarde y otra vez alegre cuando te vas a dormir, significa que tu humor es muy variable. Con un estado de ánimo tan variable te será muy difícil rendir siempre al mismo nivel.
Para poder aprender hace falta tener una personalidad que no tienda a complicarse la vida en exceso y un entorno inmediato que no interfiera en el rendimiento. Los campeones son personas mentalmente sanas y con un entorno que, por lo menos, no resta. Y es que, a veces, la mejor manera de sumar consiste en no restar.
Quiero presentarte a un campeón, se trata del extenista Àlex Corretja. Llegó hasta la segunda posición del ranking mundial de tenistas profesionales y disputó la final del Roland Garros, el torneo más prestigioso en tierra batida.
Hace poco compartimos una charla dirigida a jóvenes tenistas. Uno de los niños le preguntó por el secreto de su éxito. Àlex dibujó una serie de círculos en la pizarra: la familia, los amigos, la pareja y el equipo técnico. Juntos, habían formado su entorno durante su carrera deportiva. Pues bien, tal y como dijo el propio jugador, el secreto consistió en que «todos tocaban la misma música que yo, todos remábamos en la misma dirección». El niño no quedó satisfecho con la respuesta y añadió: «¿Y qué hubiera pasado si uno de ellos no hubiera tocado la misma música?». «Tendría que haber prescindido de él, pues hubiera echado por tierra el trabajo de todos los demás…», respondió Àlex. Este es un buen ejemplo del papel que juega el entorno de los deportistas.
Y es que incluso en los deportes individuales resulta imprescindible trabajar en equipo para alcanzar el máximo rendimiento. De la misma manera, el resto de mortales no deportistas, para dar nuestro 100%, necesitamos contar con un entorno que nos apoye. Difícilmente ofreceremos lo mejor de nosotros mismos en la reunión programada para primera hora de la mañana, si ayer noche tuvimos una discusión en casa.
El propio Corretja nos sirve para ilustrar que los campeones son gente mentalmente sana. Su padre, Lluís, cuenta que, si tuviera que escoger entre todos los triunfos que obtuvo su hijo, se quedaría con el Premio Stefan Edberg. Se trata del primer premio que se concedía al jugador con mayor fair play del circuito profesional. Un deportista que juega limpio muestra valores, autocontrol y una fuerte dosis de humildad. Con tan sólo veintidós añitos, Àlex fue distinguido por sus compañeros por su manera de ser.
Pasemos ahora al segundo nivel de la pirámide. Además de poder aprender es necesario querer aprender. Nos referimos a la motivación.
Para estar motivado hacen falta dos condiciones: tener muy claros los objetivos que se persiguen y pagar todo el precio para conseguirlos. Este precio está formado por tres impuestos:
Renuncias y sacrificios para poder optar al objetivo.
Esfuerzos para cumplir con el programa de trabajo que requiere el objetivo.
Aceptación de las consecuencias, tanto positivas como negativas, que se derivan de haber optado por ese objetivo y haberse comprometido con esos medios de trabajo.
Pongamos un ejemplo. Yo no puedo decir que estoy motivado por ser la persona más rica del mundo. Aunque tengo muy claro que me encantaría serlo, no hago absolutamente nada para conseguirlo. De hecho, me dedico a la psicología del deporte… Y, a no ser que contrate mis servicios un jeque árabe, interesado en fundar un equipo de fútbol que plante cara al Barça, no tengo la menor opción de ganar mucho dinero.
Ahora bien, sí puedo asegurar que estoy motivado por ser un buen psicólogo aplicado al deporte. Siempre ha sido mi objetivo, después de 23 años de ejercicio profesional tengo bastante claro cómo conseguirlo y cada día pago todo el precio para lograrlo. Así me va en el resto de facetas de mi vida personal.
César Luis Menotti, el Flaco, el seleccionador de fútbol que hizo campeona del mundo a Argentina, tiene muy claros estos conceptos. Una de sus frases favoritas dice así: «No hay que llorar cuando se pierde, hay que llorar cuando se traiciona el compromiso».
Los campeones tienen muy claros sus objetivos y pagan todo el precio para conseguirlos.
Hasta ahora podemos aprender y queremos hacerlo. Entonces, algo aprenderemos, ¿verdad? Todavía no; nos falta el tercer nivel de la pirámide: «saber aprender».
Cuenta la biografía de Mike Tyson, campeón mundial de boxeo en la categoría de peso pesado, la siguiente anécdota. Un día, estando el púgil a punto de saltar al ring, planteó lo siguiente a su maestro:
–Tengo que confesarle algo: estoy a punto de subirme a la lona y me muero de miedo… Temo que mi rival me destroce.
El maestro le contestó:
–Cuando dos boxeadores pisan un ring siempre hay uno de los dos que merece más que el otro ganar. Eso no significa que vaya a hacerlo. Pero creer que mereces ganar te ayuda a controlar el miedo. Si te pregunto ahora si mereces ganar, puedes engañarme. Pero si te lo preguntas a ti mismo, una vez estés en el cuadrilátero, frente a tu rival y mirándole a los ojos, entonces jamás podrás engañarte.
–¿Y qué tengo que hacer para poder creer que merezco ganar el combate?
–Realizar tu mejor esfuerzo en todos y cada uno de tus entrenamientos hasta llegar al combate.
Hace poco un entrenador me dijo: «Sólo hay dos clases de deportistas: los que buscan una excusa para poder fallar y los que andan buscando una solución para poder acertar». Y tenía razón: si cada vez que fallamos buscamos una excusa para justificar nuestros errores, entonces no tenemos la obligación de cambiar nada. Y si no cambiamos nada, no progresamos.
Hace ya algún tiempo se realizó un interesante estudio psicológico. Para llevarlo a cabo se seleccionaron los mejores deportistas. Sólo pudieron participar en la investigación aquellos deportistas que habían subido al podio de su especialidad en campeonatos de Europa y del mundo. Se buscaba el común den...

Table of contents