El efecto
eBook - ePub

El efecto

Sonia González Boysen

Share book
  1. 192 pages
  2. Spanish
  3. ePUB (mobile friendly)
  4. Available on iOS & Android
eBook - ePub

El efecto

Sonia González Boysen

Book details
Book preview
Table of contents
Citations

About This Book

Aún cuando permanezcan callados, herméticos, tímidos e inexpresivos, todos los individuos transmiten "algo", desde su esencia particular y única.

Incluso dormidos, quietos, distantes o de espaldas, siempre infunden parte de sus vidas en las otras personas a su alrededor. Tan solo con el milagro permanente de respirar, proyectan una imagen. Un clima interior que trasciende y revela el "aire" personal. Nadie sabe cómo llamarlo, pero es evidente que ¡ahí está!

Ese "soplo" vivencial y personal, no se oye, ni se ve, ni se siente, pero usted lo exhala desde su interior sobre las personas, lo infunde en el ambiente y hasta parece que lo deja impregnado en su en torno. Es su maravillosa huella. Su marca personal.

Eso es El efecto. Nadie sabe dónde le queda, pero ahí está siempre. Es su diferencial indescriptible, intangible y fantástico, que lo conecta de manera exclusiva con los demás y lo hace único e irrepetible.

Y es justo ese "no sé qué" intangible, pero tan real, lo que lo llevará por las páginas de este fascinante libro de El efecto, que querrá devorar en un día, para saber cuál ha sido su EFECTO de toda una vida.

Frequently asked questions

How do I cancel my subscription?
Simply head over to the account section in settings and click on “Cancel Subscription” - it’s as simple as that. After you cancel, your membership will stay active for the remainder of the time you’ve paid for. Learn more here.
Can/how do I download books?
At the moment all of our mobile-responsive ePub books are available to download via the app. Most of our PDFs are also available to download and we're working on making the final remaining ones downloadable now. Learn more here.
What is the difference between the pricing plans?
Both plans give you full access to the library and all of Perlego’s features. The only differences are the price and subscription period: With the annual plan you’ll save around 30% compared to 12 months on the monthly plan.
What is Perlego?
We are an online textbook subscription service, where you can get access to an entire online library for less than the price of a single book per month. With over 1 million books across 1000+ topics, we’ve got you covered! Learn more here.
Do you support text-to-speech?
Look out for the read-aloud symbol on your next book to see if you can listen to it. The read-aloud tool reads text aloud for you, highlighting the text as it is being read. You can pause it, speed it up and slow it down. Learn more here.
Is El efecto an online PDF/ePUB?
Yes, you can access El efecto by Sonia González Boysen in PDF and/or ePUB format, as well as other popular books in Betriebswirtschaft & Unternehmenskommunikation. We have over one million books available in our catalogue for you to explore.

Information

Publisher
HarperEnfoque
Year
2013
ISBN
9781602558885
CAPÍTULO 1
EL EFECTO SE TRANSMITE Y SE PROYECTA. ¡CONCIENTÍCELO!
ESA TARDE PRIMAVERAL DE ABRIL, MIENTRAS CAMINÁBAMOS apresurados por los pasillos del edificio del One CNN Center en Atlanta, Georgia, mi colega y gran amigo Kevin Cook —en ese momento director de comunicaciones para Latinoamérica y el Caribe de la organización global World Vision International—, estaba sorprendido por la forma como la gente se dirigía a mí con una amabilidad inusual.
Íbamos a una cita estratégica con Robert Lenz, gerente de asignaciones del canal, para presentarle una campaña de prensa sobre la niñez en Latinoamérica. Mientras llegábamos a la reunión, algo sucedía en el ambiente a mi alrededor. Aquel enorme hombre de raza negra encargado de la recepción, la vendedora rubia de la tienda de souvenirs CNN, los amigos periodistas latinos, todos me saludaban y sonreían con gentileza y extraordinaria cortesía.
Para mí todo eso era normal y cotidiano. Pero el señor Cook estaba atónito por la respuesta tan amable de la gente hacia mí. Se notaba un poco asombrado. Su perfil de hombre serio, con talla de periodista mundial, muy profesional, con estilo imponente, severo, directo, práctico y objetivo, de pronto comenzó a distenderse. Relajó un poco su ceño siempre fruncido y con entonado acento estadounidense les dijo sonriente a los colegas de CNN: «¡Este es el efecto Sonia!». Todos rieron y celebraron su broma. Luego repitió lo mismo frente a la importante comitiva que nos recibió en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, California, a donde íbamos a visitar a los colegas de Los Angeles Times, La opinión y Univisión.
Eso fue en el año 2002. Me quedó tan marcada su mirada estupefacta ante la gentileza de la gente conmigo y su expresión —¡el efecto Sonia!—, que desde entonces (hace diez años) no he parado de analizar e investigar el tema del efecto que uno causa en los demás, aun sin proponérselo. Así fue como el efecto se convirtió en parte de mi plan de capacitación empresarial. Luego, en una atractiva conferencia con la que he visitado grandes escenarios en diferentes países y ahora, por supuesto, en el título y tema central de este libro.
Lo propuse después de una exitosa conferencia en una feria de libros en el World Trade Center de Ciudad de México, al visionario vicepresidente de Grupo Nelson, Larry A. Downs. Gracias a su fino olfato para saber cuándo uno de sus autores prepara un bestseller bien marinado, hoy usted tiene en sus manos esta obra que espero le sirva en su comunicación y la disfrute al máximo, como una agradable lectura para su ánimo.
Esta permanente investigación de la comunicación inteligente me ha llevado a descubrir las riquezas y los secretos del efecto. Su tarea ahora será identificarlo en usted mismo y también en las personas a su alrededor. Saber cuál es ese «algo» especial que lo lleva a generar un impacto ante la gente le servirá para influenciar, impactar, ser eficiente, asertivo, persuasivo y, sobretodo, para conquistar su sueño.
El efecto que causamos lo vemos cada día reflejado en el espejo. También si filmamos una presentación o una animada reunión entre amigos, podremos analizar con detenimiento la comunicación no verbal y el lenguaje corporal. Pero el principal medidor del efecto es la reacción que despertamos en las personas a nuestro alrededor. Préstele atención a la respuesta que le dan los familiares, amigos, subalternos, vecinos y todas las personas a dondequiera que llega.
A partir de estas páginas entenderá que, sin hacer nada para generarlo, usted produce un efecto en la atmósfera. Es una realidad tan física como el tono de su piel y tan espiritual como su esencia, a imagen de Dios. El secreto está en encontrar cuál es el diferencial de su efecto con relación al de todos los demás. Aceptarlo, valorarlo y amarlo. De esa manera lo podrá potenciar al máximo. Le dará el mayor aprovechamiento para ser exitoso en la vida y servir a las personas en base a su propia particularidad.
En mi caso, encuentro que mi mayor diferencial es la calidez. Está impregnada en mi naturaleza. Así nací: alegre, sonriente, vivaz, vibrante, emotiva, efusiva, bailadora, cantadora, chispeante y comunicativa. ¿Por qué?... No lo sé. Solo sé que ese es mi diseño personal. Conectarme con mi efecto y mi diseño original me permite ser una persona segura, realizada y feliz. Por añadidura, eso me lleva a importantes escenarios internacionales como autora y conferencista exitosa. Así, cumplo mis sueños y sobrepaso las expectativas de mi visión original.
Las personas como yo, con el efecto calidez, nunca nos proponemos nada para generar ese resultado. Pero siempre lo producimos. Porque nos encanta sonreír, hablamos con pasión, les brindamos afecto a las personas, las miramos a los ojos con verdadero interés, les damos ánimo, motivación y, sobretodo, las valoramos. ¡Nos encanta la gente! Todo eso produce en nuestra zona de influencia un vibrante impacto especial, un nivel de empatía muy alto y algo que no se puede expresar en términos científicos, pero que está ahí. Es un sello obvio, innegable, visible, inconfundible: es el efecto calidez.
No se puede decir que el efecto es una «energía» —como se le llama ahora a todo aquello que no sabemos cómo describir— es mucho más que eso. Necesitamos concientizarlo para empezarlo a describir y analizar, como parte de nuestro «mentoring para comunicadores inteligentes» iniciado con mi anterior serie de libros acerca de habilidades de comunicación: hablada, escrita y de escucha.1
Por todo eso, y mucho más, este libro se llama así: «El efecto». Con permiso de Kevin Cook, que se encuentra ahora en África, como director global de comunicaciones de World Vision International. Por lo que veo en Facebook, ahora les sonríe a los hermosos niños de raza negra, a su linda familia, a los leones, los elefantes y las cebras, con mucha calidez, según muestran sus extraordinarias fotos, desde Kenya.
Ahora en mi día a día, como mentora de entidades, cuando estoy en una exhaustiva capacitación o conferencia para un público numeroso, siempre les pregunto a algunos de los asistentes: ¿Qué les transmito? y la gente me dice cosas como: «entusiasmo, pasión, fuerza, ganas, energía, criterio, inteligencia, renovación, intensidad, alegría, seguridad, estilo...» y un montón de cosas más. Luego les digo: «Muy bien, ese es el mío, pero... ¿cuál es su efecto?». Se quedan pensativos y me miran sorprendidos, como con una incógnita dibujada en la frente.
Sé bien lo que transmito. Estoy segura de que ese es mi efecto personal y el sello de mi éxito como comunicadora y como persona. Mi tarea ahora es pulirlo y mejorarlo día a día. Potenciarlo y aprovecharlo al máximo, como mi mayor activo. Ese ha sido mi oficio por los últimos años en los procesos de mentoring en comunicación para miles de profesionales de entidades multinacionales. Sé que será mi ejercicio físico, emocional y espiritual para toda la vida. Un proceso de transformación y mejoramiento continuo, delicioso, apasionante e imparable.
Durante un programa de capacitación para más de 1,500 funcionarios en la empresa Avianca, comprobé la dimensión del valor fascinante de la calidez en la comunicación. Espero que transforme también su vida y le lleve a hacer el clic con su propio efecto. Siempre que termino el diagnóstico de debilidades y fortalezas en las competencias comunicacionales de ejecutivos en distintas ciudades de Colombia, México, Paraguay, Costa Rica, Brasil, Perú, Ecuador, Miami, Nueva York, Washington, Portland, Tulsa, Los Ángeles, Atlanta, Dallas, Houston... muy dentro de mí queda siempre un sentimiento: esto es mucho más que una capacitación en técnicas de comunicación efectiva.
Por eso hoy estoy frente a usted, amigo lector, con el reto vivencial de enfocarlo en ese «algo» que va mucho más allá de sus aptitudes, habilidades y destrezas comunicacionales. Juntos le apuntaremos al nivel más alto de su efecto y de su proyección personal. Porque, aunque no lo crea, el efecto lleva su nombre.
Me gusta siempre mencionar la película Kung Fu Panda, de Walt Disney. Aquel torpe, feo, ojeroso, pero hermoso oso grandulón, se sentía inferior a sus competidores para encontrar el mapa del éxito. Pero cuando descubrió el rollo, lo abrió y no había más que un espejo. Al mirar el espejo, se vio él mismo. Ese era el mapa del éxito.
Puede que no fuera el más lindo, ni el que tuviera mayores destrezas, ni el más talentoso, ni con mayores credenciales, pero su valor fue encontrar su propia valía, independiente de los demás. Al verse reflejado, descubrió el efecto en el espejo. Ese era el mapa que lo llevaría al éxito rotundo.
Mi meta es empoderar su efecto como una herramienta de crecimiento. Colocar en sus manos ese mapa con espejo incluido. Impulsarlo y promoverlo a través de su diferencial. Desde su esencia. Hasta ver el cambio extremo, no solo en su vida, sino en la de su familia. Hasta que lleguemos a transformar la cultura de cada entidad, ciudad y nación, y la llevemos a una cultura de comunicación inteligente.
Gerardo Volio, presidente y fundador de Volio & Trejos —una de las entidades constructoras más sólidas y exitosas de Latinoamérica—, concluyó después de tres días de entrenamiento con su equipo, en enero de 2012: «Esto es mucho más que una capacitación». Fui a parar a su empresa porque me vio en una entrevista en CNN con Ismael Cala y le dijo a su gerente administrativa, Gisella Vargas: «Contáctala, la necesitamos aquí ya». Volio es un depurador infatigable de la comunicación, con espíritu de mejoramiento continuo y excelencia. Tuvimos un programa de capacitación grandioso en San José, Costa Rica, sumergidos con su comité ejecutivo y toda la empresa en el entrenamiento de las habilidades comunicacionales.
Lo que comenzó como un taller, hoy es un programa de largo alcance para el desarrollo de la empresa. Ellos siguen mis libros de habilidades de comunicación y los tienen como material permanente de consulta. Yo sigo como su mentora en comunicación, con mucho honor. Creo que tiene toda la razón Gerardo Volio. Esto es mucho más que enseñar a hablar, escribir o escuchar de manera asertiva y persuasiva, como comunicadores de alto impacto. Se trata de transformar a las personas. De darles herramientas para la vida. De llevarlas a encontrarse con ellas mismas.
Me parece que todo este proceso de estudio del efecto es como el buen vino y los mejores quesos: madurado en su propia esencia. Lo invito ahora a degustarlo. Juntos podemos ingresar en esta maravillosa tarea dinámica y lúdica de detectar, reconocer y aprovechar el efecto que usted mismo causa en su zona de influencia.
¿Sabe usted cuál es su efecto? Permítame ayudarle a descubrirlo, potenciarlo y maximizarlo, hasta llegar a disfrutarlo. Será un proceso poderoso. Comience por reconocer la necesidad de encontrar la conexión con la esencia única en usted. Al hacer ese clic interior, descubrirá el efecto y será imparable el resultado. El efecto no se mide de manera cuantitativa sino cualitativa. En las universidades empresariales a donde voy, me piden siempre una evaluación de cada uno de los entrenados. Siempre califico la aplicación que lograron en la técnica. Pero cuando llego al espacio de las «Observaciones» es donde de verdad creo que sí puedo calificar: describo sus cualidades y destaco su potencial. Mi calificación siempre le apunta a su efecto, por eso a ellos les encanta. Porque desde niños solo los evaluaron con cifras.
Muchas veces los asistentes a los entrenamientos, al leer las observaciones, han entendido de verdad cuáles son sus virtudes potenciales en la comunicación y en su capacidad de transmitir. Algunos hasta han decidido cambiar de carrera o piden ser reubicados en su puesto de trabajo.
Descubrir el efecto es sensacional. Puede salvarlo de graves equivocaciones. Porque al enchufarse con él, usted logrará alinearse con su verdadera felicidad. Sabrá para qué es bueno. Le orientará para entender lo que en realidad le gusta hacer en la vida y cómo llevarlo a su mayor potencial.
El Nobel de Literatura Gabriel García Márquez dice: «Creo, con una seriedad absoluta, que hacer siempre lo que a uno le gusta, y sólo eso, es la formula magistral para una vida larga y feliz».2
El sí que lo sabe. Del olvidado pueblo de Aracataca donde nació —al igual que mi padre—, a Barranquilla, luego al periodismo en Bogotá —en El espectador—, después a las grandiosas novelas y de allí al Nobel. Más de cien años de efecto.
Descubrir el efecto que causamos es parte de esa felicidad. Porque nos alegra saber por dónde enfocar lo que realmente somos. Nuestro efecto se relaciona con aquello que nos apasiona y con lo que más nos gusta hacer en la vida. Cada uno genera uno muy distinto. Solo si se ubica bien en el suyo, logrará los sorprendentes resultados que tanto ansía obtener en su proyección personal.
Por ejemplo: si mi efecto es el de la calidez, logro transmitir mensajes de manera asertiva y persuasiva, porque me encanta la gente. Por eso debo dedicarme a motivar a las personas. Solo entonces sabré que no me encuentro en el lugar equivocado. Porque la comunicación es mi pasión, las relaciones con las personas son mi dicha. Si mi oficio se orienta hacia esa meta, quiere decir que estoy bien direccionada para lograr un efecto exitoso. Pero si mi efecto es la calidez y me dedico a realizar tareas que no requieren de un relacionamiento amable con la gente, sino más bien policivo, de dar órdenes estrictas y muy tajantes, entonces: primero, nunca desempeñaré bien la tarea. Segundo, nunca seré feliz, sino una mediocre y desgraciada para toda la vida.
Por el contrario, si mi efecto fuera la autoridad rígida, directa, fuerte y autoritaria, no me sentiría realizada como comunicadora. Porque para dedicarse al oficio de la comunicación y ser feliz, se requiere del efecto calidez. ¡Al extremo!
Potenciar el efecto es alcanzar la conexión con el diseño original de cada uno. Eso le ayudará a encontrar más fácilmente su propósito en la vida. Porque cuando esté seguro de cuál es el efecto que causa, experimentará una sensación de seguridad y confianza, por la valoración de sí mismo y de la riqueza de sus talentos. Lo que impulsa el propósito es la esencia interior de las personas. Su interioridad. No las oportunidades o requerimientos externos que les ofrece o impone la vida. Porque estos son apenas circunstanciales, pero no esenciales.
Si empodera y maximiza el efecto, será como los mayordomos fieles de la parábola de las monedas de oro en la Biblia, que multiplicaron al ciento por uno lo poco que les recomendó su señor. Por eso les dijo: ¡Bien, buen siervo! En lo poco has sido fiel, en lo mucho te pondré. Pero si no sabe encontrar, ni valorar su efecto, será como el siervo infiel de la parábola, que prefirió esconder sus talentos debajo de la tierra, porque le dio miedo y se acobardó.
Sea valiente. No esconda su efecto. Vamos a empoderarlo al cien por ciento.
CAPÍTULO 2
EL TESORO DE LOS SIETE SECRETOS DEL EFECTO. ¡ENCUÉNTRELO!
DESCUBRIR EL EFECTO HA SIDO UN SERIO, FUERTE Y CABAL TRABAJO de investigación que llegó a convertirse en una formidable revelación de siete secretos básicos, gracias a este apasionante enfoque en la construcción de una cultura de comunicación inteligente en Latinoamérica, Estados Unidos, Europa y todo el mundo de habla hispana. Este libro es una invitación abierta a realizar su propio ejercicio de búsqueda, hasta descubrir la revelación de esos siete secretos del efecto. Esta tarea será tan sorprendente y maravillosa que, le aseguro, usted terminará por convertirse en una especie de detector del efecto suyo y el de otras personas.
Entender esos secretos enriquecedores del efecto que uno transmite a la gente, concientizándolos y sensibilizándolos, permite empoderar mucho más el impacto de la comunicación a la vez que se logra un mayor alcan...

Table of contents