INTRODUCCIÓN
LEVÁNTATE E INSPIRA
ASÍ QUE ESTÁS hojeando este libro y pensando invertir tu dinero en él. Y lo que es más importante, estás pensando invertir también tu tiempo leyéndolo —y el tiempo… bueno, ese es el único bien que jamás recuperaremos en este mundo—. Una vez lo gastas, es imposible redimirlo, razón por lo cual debes asegurarte de gastarlo con prudencia.
Enfrentémoslo, la atención es de lo poco que los industriosos e inventores no han podido fabricar en este mundo. Por eso, ahora que tengo la tuya, quiero honrar ese hecho y hacer que valga la pena haberla captado.
Entiendo que tanto tu tiempo como tu atención son valiosos. Así que este es un libro sobre cómo gastarlos de manera productiva, significativa e intencional. Después de todo, todos los seres humanos recibimos las mismas 24 horas al día, ya sea que tengamos $1 millón o $100 dólares en el banco. Esta lectura trata sobre cómo hacer que el tiempo trabaje a tu favor, cómo usarlo con el fin de incrementar tanto tu rendimiento como tu nivel de trabajo y acelerar tu camino hacia la cima.
¿Sabes? He visto algunas cosas y conocido a todo tipo de personas interesantes que disfrutan de gran éxito. He andado con líderes mundiales, así como con gente que tiene la gran capacidad de cambiar para bien las reglas de juego. De todos ellos vivo aprendiendo constantemente y una de las lecciones que he aprendido es que no hay una fórmula secreta para obtener el éxito. Sin embargo, siempre existe una mezcla de ciertos ingredientes esenciales que son infaltables si quieres triunfar. La verdad es que hay un rasgo común que observo en quienes conozco y están esforzándose y prosperando: todos tienen una capacidad de trabajo insuperable. En serio, están en función de su trabajo día tras día y se esfuerzan al máximo. Podrías llamarlo aspiración. También podrías llamarlo determinación. Si quieres, llámalo entusiasmo, valor o ganas.
Yo lo llamo persistencia y ganas de triunfar y estoy aquí para darte una luz al respecto.
Quizás, estés pensando que ya leíste uno o dos de mis libros y te preguntes qué más me queda por decir. He escrito sobre el poder de la quiebra y les aseguro a mis lectores que no necesitan un gran presupuesto para tener éxito como empresarios; también he escrito acerca de cómo todos somos nuestra marca personal y sobre mi ascenso desde las calles de Hollis, Queens, hasta lo más alto de la industria de la moda urbana que ayudé a crear. Pero llegó el momento de hacer una inmersión profunda. Es hora de que te lleve entre bambalinas y te muestre cómo aprovecho mis días. Te contaré todo sobre las motivaciones que me hacen levantarme cada mañana y luchar —cómo eran las cosas para mí cuando apenas estaba empezando y cómo son ahora—. Te mostraré cómo fui cambiando mi enfoque a medida que aprendí a levantarme a trabajar duro para ir en pos de todos estos nuevos objetivos que fueron surgiendo frente a mí.
Te compartiré un montón de mis hábitos y rutinas del día a día con el fin de mostrarte cómo hago el mejor uso de mis 24/7, así como los de algunos de los personajes más exitosos del mundo y de todos los ámbitos de la vida —gente que me inspira, me sorprende y me empuja a ser lo mejor que pueda llegar a ser.
La idea es que, al abrir la cortina y mostrarte cómo viven y trabajan estos triunfadores, yo pueda resaltarles algunos comentarios a los lectores que buscan mejorar las cosas. Tal vez, adoptes una gran cantidad de ideas. O tal vez, solo tomes una estrategia que te parezca primordial para ti y encuentres una manera de vincularla a lo que estés haciendo de manera tal, que te lleve a transformar tu vida para siempre. Así es como me sucedió la tercera o cuarta vez que leí el gran libro de Napoleón Hill, Think and Grow Rich. Sus ideas encendieron algo en mi interior y se convirtieron en una práctica muy específica que comencé a usar y a desarrollar, y que me puso en el camino indicado hacia el éxito. Luego, te contaré algo más sobre eso, pero el punto aquí es que todos tenemos la capacidad de aprender algo de quienes nos rodean, de la gente que admiramos.
Piensa en las personas que admiras en tu vida, bien sea en tu campo de acción o al interior de tu comunidad, que parecen mantenerse en marcha y avanzar. Es genial sentirnos inspirados con los éxitos de otros, pero algo en lo que quiero que pienses al leer este libro es en lo importante que es no sentirnos intimidados por los éxitos de los demás. Los soñadores que son 10, 20 o 100 veces más triunfadores que quienes los rodean casi siempre se conducen de una manera más enfocada y más decidida que la gente que tienen a su alrededor. ¿Cuál es el factor diferenciador entre ser como el promedio de la gente y ser genial? ¿Entre la pobreza y la prosperidad? Bueno, una de las claves es tener la actitud correcta — ese fue el mensaje que compartí con los lectores en The Power of Broke. Pero otra clave importante es saber cómo hacer un mejor uso de tu tiempo, cómo optimizar cada momento. Ese será nuestro enfoque a lo largo de las siguientes páginas.
Estoy convencido de que un pequeño porcentaje de nuestra vida está determinado por los actos de Dios —digamos que alrededor del 2%—. Tsunamis, terremotos, ganarnos la lotería, tener encuentros casuales con personas y oportunidades que representen perspectivas significativas… bien o mal, estas son ese tipo de eventualidades que nos pasan y están fuera de nuestro control. Pero si aceptamos esta idea, también debemos aceptar que el otro 98% de lo que nos sucede tiene que ver con las decisiones que tomamos o no, con las acciones que ejecutamos o no, con las estrategias que implementamos o no.
Tiene que ver con si decidimos o no persistir y triunfar.
El trato es este: espero que las personas que conozcas en este libro te inspiren, te sorprendan y te lleven a la acción de la misma manera que lo hacen conmigo, y que captes algo de lo que ellas están haciendo y lo apliques a lo que sea que estés dedicado en este momento de tu vida. Es más, si revisas el Índice e identificas el nombre de alguien que tiene una opinión contraria a la tuya con respecto a algún tema que sea importante para ti, me gustaría que te tomaras el tiempo para conocer su punto de vista y analizar qué es lo que plantea. Siendo sincero, no voy a decirte que estoy totalmente de acuerdo con todo lo que cada una de estas personas que menciono piensa en cada tema. Sin embargo, estoy compartiendo sus historias porque he aprendido algo importante de cada una de ellas —y que también quise compartir contigo—. Y aun si no logras identificarte con sus ideas directamente, espero que te des la oportunidad de conocerlas, aprender de ellas y les permitas inspirarte.
Tal vez, no seas una madre que está tratando de criar a tres niños con dificultades de aprendizaje, pero confía en mí cuando te digo que aprenderás de la lucha de esa madre —aquí, te encontrarás con una de ellas.
Sí, lo más probable es que hayas nacido con todos tus brazos y piernas, pero es mejor que creas que puedes captar un par de cosas de alguien sin extremidades —también lo conocerás a lo largo de esta lectura.
Verás, escribí este libro para dos tipos de personas. El primero está compuesto por gente que ya está persistiendo y triunfando. Se trata de esa persona que está allá afuera haciendo las cosas todos los días, tratando de persistir y alcanzar sus metas, de obtener más por su dinero y mantenerse motivada. De pronto, ese alguien seas tú. A lo mejor, ya estás listo para escuchar a alguien como Russell Simmons, uno de los grandes visionarios culturales a nivel mundial y uno de mis verdaderos modelos a seguir cuando estaba dándome a conocer, que demostró que, con un poco de jugo y mucha determinación, es posible convertir una chispa creativa en un imperio multimedia. Tal vez, tengas algo que aprender de Nely Galán, la exjefa de la red de Telemundo; o de Carlos Santana, el legendario guitarrista; o de Catherine Zeta-Jones, la actriz ganadora del Premio de la Academia, sobre lo que le costó persistir y triunfar mientras avanzaba hasta convertirse en una de las figuras más conocidas en su campo.
Con todas y cada una de ellas conversé, así como con una docena más y les hice preguntas sobre las que ellas mismas dijeron que nunca antes se las habían hecho. Les pregunté qué hacen tan pronto como se levantan por la mañana, a qué y a dónde acuden en busca de inspiración, cómo organizan sus días. También les hice algunas preguntas más difíciles —preguntas que me hacen casi todos los días los aspirantes a emprendedores que quieren hacer algo por sí mismos y los líderes corporativos que me invitan a motivar a sus empleados con el fin de que aprendan y empiecen a pensar más allá de sus propios límites.
Obviamente, cada una de estas entrevistas fue fluyendo de manera orgánica, porque, a pesar de que llegué con una lista de preguntas, nuestras conversaciones fueron abiertas y fluidas. Es posible que hayan comenzado de la misma forma —con mi curiosidad por saber cómo eran sus días cuando ellos recién empezaban, cómo son sus días ahora y cosas por el estilo.
Luego, tomé las respuestas que recibí y creé una especie de huella que tú puedas seguir a lo largo de tu meta, sea cual sea. Siendo honesto, te diré que, sin importar quién seas, ni lo que hagas —ya sea que estés tratando de ascender en el mundo corporativo, convertirte en artista o creativo, ser un gran empresario o incluso sentirte más feliz y más realizado en tu vida—, si quieres tener éxito, es necesario que te enfoques en el trabajo. Recuerda, estos triunfadores ultraexitosos cuentan con los mismos 1.440 minutos diarios que tú y hay mucho que aprender de cómo ellos los usan. Quién sabe… es muy probable que, a lo largo de estas páginas, encuentres un consejo o un simple hábito que cambie tu vida por completo, siempre y cuando encuentres la manera de apropiarte de él e implementarlo.
El punto es que he aprendido mucho de todos mis entrevistados sobre lo que se necesita para tener éxito y ahora, a través de este libro, tú también aprenderás, persistirás y triunfarás.
También escribí este libro para lectores que ya están en una posición de liderazgo y que quieren inspirar a otros a persistir y triunfar. A lo mejor, ya seas un empresario o un intrapreneur. Quizás, estés a cargo de un equipo de 100 o 1.000 miembros o solo tengas a una o dos personas que te buscan como su guía. De pronto, eres un padre de familia que desea modelar un comportamiento ejemplar para sus hijos. No importa —el hecho es que estás buscando formas de enseñar, de liderar, de dar un ejemplo positivo y sabes tan bien como cualquiera que, a veces, toma tiempo aprender una lección—. No siempre absorbemos las cosas desde la primera vez. Podrías necesitar explicar tres, cuatro, 10 o 12 veces un mismo mensaje antes de que este sea entendido. Es por eso que he recopilado tantas historias diferentes aquí, porque nunca se sabe cuándo algo hará clic en tu interior o te hablará de tal manera que te sea imposible no entenderlo.
Cuando estaba escribiendo este pasaje de apertura y dándole ...