Por el liderazgo a la santidad
eBook - ePub

Por el liderazgo a la santidad

Guadalupe Ortiz de Landázuri, una adelantada a nuestro tiempo

  1. 192 páginas
  2. Spanish
  3. ePUB (apto para móviles)
  4. Disponible en iOS y Android
eBook - ePub

Por el liderazgo a la santidad

Guadalupe Ortiz de Landázuri, una adelantada a nuestro tiempo

Descripción del libro

El objetivo de este libro es acercar la figura de Guadalupe a un público nuevo, fundamentalmente del ámbito empresario, académico y científico, siendo, una oportunidad para difundir la llamada a la santidad en medio del mundo. Hay un creciente interés de que las mujeres se involucren en áreas STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics) y Guadalupe se nos presenta como una mujer pionera en su disciplina, la Química, y a la vez de vanguardia porque asumiendo distintas responsabilidades supo compatibilizar su profesión con la dedicación a su familia, e impulsar iniciativas educativas y de promoción social para otras mujeres. Hasta ahora se han escrito libros sobre su vida y su unión con Dios, basados en testimonios recogidos para su proceso de beatificación y en las numerosas cartas que dejó escritas. Se echaba en falta un libro que pueda analizar su trayectoria profesional a la luz de la vocación recibida y que la muestre como mujer líder, emprendedora, descubridora y formadora de talentos que pueda inspirar la vida de otras mujeres y hombres.

Preguntas frecuentes

Sí, puedes cancelar tu suscripción en cualquier momento desde la pestaña Suscripción en los ajustes de tu cuenta en el sitio web de Perlego. La suscripción seguirá activa hasta que finalice el periodo de facturación actual. Descubre cómo cancelar tu suscripción.
Por el momento, todos los libros ePub adaptables a dispositivos móviles se pueden descargar a través de la aplicación. La mayor parte de nuestros PDF también se puede descargar y ya estamos trabajando para que el resto también sea descargable. Obtén más información aquí.
Perlego ofrece dos planes: Esencial y Avanzado
  • Esencial es ideal para estudiantes y profesionales que disfrutan explorando una amplia variedad de materias. Accede a la Biblioteca Esencial con más de 800.000 títulos de confianza y best-sellers en negocios, crecimiento personal y humanidades. Incluye lectura ilimitada y voz estándar de lectura en voz alta.
  • Avanzado: Perfecto para estudiantes avanzados e investigadores que necesitan acceso completo e ilimitado. Desbloquea más de 1,4 millones de libros en cientos de materias, incluidos títulos académicos y especializados. El plan Avanzado también incluye funciones avanzadas como Premium Read Aloud y Research Assistant.
Ambos planes están disponibles con ciclos de facturación mensual, cada cuatro meses o anual.
Somos un servicio de suscripción de libros de texto en línea que te permite acceder a toda una biblioteca en línea por menos de lo que cuesta un libro al mes. Con más de un millón de libros sobre más de 1000 categorías, ¡tenemos todo lo que necesitas! Obtén más información aquí.
Busca el símbolo de lectura en voz alta en tu próximo libro para ver si puedes escucharlo. La herramienta de lectura en voz alta lee el texto en voz alta por ti, resaltando el texto a medida que se lee. Puedes pausarla, acelerarla y ralentizarla. Obtén más información aquí.
¡Sí! Puedes usar la app de Perlego tanto en dispositivos iOS como Android para leer en cualquier momento, en cualquier lugar, incluso sin conexión. Perfecto para desplazamientos o cuando estás en movimiento.
Ten en cuenta que no podemos dar soporte a dispositivos con iOS 13 o Android 7 o versiones anteriores. Aprende más sobre el uso de la app.
Sí, puedes acceder a Por el liderazgo a la santidad de Sandra Monserrat Idrovo Carlier,María Laura Caruso en formato PDF o ePUB, así como a otros libros populares de Didattica y Biografie in ambito religioso. Tenemos más de un millón de libros disponibles en nuestro catálogo para que explores.

Información

Editorial
LID Editorial
Año
2020
ISBN del libro electrónico
9789871822164
iv
La persona del líder
Existen personas que cuando uno las conoce y no necesariamente por mucho tiempo, se confía en ellas; uno se siente capaz de seguirlas, de trabajar a su lado; de jugársela por aquello que ellas impulsan: un proyecto, un propósito, un reto, un sueño… Tienen “algo”, no somos capaces de definirlo, porque pueden ser varias cosas a la vez, pero está ahí. Ese “algo” también las hace capaces de cambiar de actividades, de trabajos, y en cada circunstancia, volver a inspirar lo mismo. Guadalupe tenía ese “algo”, como hemos visto en los diferentes trabajos que ella desempeñó. Desentrañar ese “algo” no es fácil pero pasa por identificar esas capacidades, -competencias podemos llamarlas-, que lo constituyen y ver cómo se manifestaban en Guadalupe.
Empatía
Una de estas competencias es la empatía. Se puede definir como la capacidad de ponerse en el lugar del otro, de hacerse cargo de lo que le sucede a la otra persona. Ese hacerse cargo, a su vez, requiere dejar a un lado el uno mismo para situarse en la vida del otro desde el otro, no desde la historia, experiencia o valores propios. Los estudiosos sostienen que la empatía en la persona que lidera tiende a llevarla a tomar decisiones justas porque es capaz de ponerse en el lugar del otro y contextualizar esa situación. Le permite alejarse de sus estereotipos y prejuicios personales para relacionarse con el otro en su individualidad, aquilatando sus aspectos positivos y negativos, y por tanto su potencial de desarrollo. Y Guadalupe hacía precisamente esto. Recuerda Cristina Ponce, una de las primeras mujeres mexicanas en pedir la admisión en el Opus Dei, que se daba cuenta “que su preocupación por cada una era tan grande que, por escucharnos y tratar de ayudarnos, no pensaba para nada en ella. Sabía tratar a toda la gente con delicadeza. No recuerdo haberla visto de mal humor”.51 Haciéndolo, además, posibilitaba que los demás correspondieran a ese trato con su mejor esfuerzo.
La empatía del líder ayuda a desarrollar relaciones positivas con sus colaboradores que permiten a su vez lograr objetivos y repercute de modo beneficioso, tanto para las personas involucradas en un proyecto o tarea como para las organizaciones. Pero esa empatía tiene comportamientos concretos. Uno de ellos, como lo demuestran investigaciones realizadas para probar que hace que las personas sean percibidas como “haciéndose cargo” de la situación de otra, tiene que ver con el lenguaje. Meinecke y Kauffeld (2018) descubrieron que cuando las personas usan más pronombres de la segunda persona (tú) y de la primera persona del plural (nosotros) y menos de la primera persona del singular (yo), sus colaboradores los perciben como más capaces de ponerse en su lugar. Y cuando las personas que convivieron y trabajaron con Guadalupe describen sus relaciones con ella este tipo de comportamiento salta a la vista.
Es mediados de 1973 y Beatriz Uribe, colombiana, está haciendo su tesis doctoral en Madrid en el Centro de Estudios e Investigación de Ciencias Domésticas (CEICID). La tesis sobre blanqueadores y suavizantes se la dirige Guadalupe. “Muchas veces yo llegaba a su casa para despachar con ella y al saludarla le preguntaba: Guadalupe, ¿cómo estás? Ella respondía: Muy bien chica, vamos a trabajar. Yo me sentaba con ella y me iba diciendo: ‘A lo mejor esto no conviene aquí’; ‘quitemos esto’; ‘si a ti te parece’, porque nunca me impuso nada”. Por necesidades de trabajo, Beatriz tiene que apresurar bastante su regreso a Colombia. “Cuando fui donde Guadalupe a decirle que tenía urgencia de terminar la tesis, me contestó: ‘Tranquila. No te preocupes que esto lo hacemos ´rapidito´. No llegaremos a todo lo que pensábamos, pero va a salir una buena tesis’”.52 Beatriz se sintió comprendida y segura de que Guadalupe se había hecho cargo de su necesidad y que, a pesar de la reducción de tiempo para realizar el trabajo, lo harían bien: ella y Guadalupe. No era ella sola, sino que contaba con el apoyo y recursos que pondría Guadalupe para sacar adelante la tarea. No era solo su problema, existía un nosotros que haría posible conseguir el objetivo.
Este mismo modo de hacerse cargo del otro incluyéndose en un nosotros que facilita la confianza, se observa en su correspondencia. A Cristina Ponce le escribe: “He leído despacio, y ya veo que no faltan problemas; no te preocupes tenérmelos que contar; ya sabes que precisamente el saber todo lo que pasa da mucha tranquilidad. Estoy dando vueltas al asunto, pero ten un poco de paciencia ¿quieres?, y veremos el mejor modo de hacerlo. (…) Somos todas de barro, y malo, y cuando nos tocan, en vez de sonido de cristal de bacarrá, tin suena a cacharro roto, tromp...”.53 Nuevamente surge el nosotros que, identificando una necesidad en el otro y la situación de ánimo en la que se encuentra, tranquiliza y arropa. Se pone en la situación del otro y alienta precisamente cuando surgen dificultades.
De hecho, la empatía de la persona que hace cabeza en alguna tarea, ese hacerse cargo del otro, le permite reconocer las necesidades de los que la rodean. Las residentes de Zurbarán, jóvenes universitarias, que por diferencia de edad podrían haber rechazado a la persona que era la autoridad en ese lugar -Guadalupe era la directora-, en cambio buscaban su consejo. Pero es que antes, ella se había hecho cargo de sus necesidades.
Lo mismo podríamos afirmar de las campesinas de México que encontraron en ella una aliada en su desarrollo humano. Guadalupe, conociendo las necesidades de educación de la mujer rural en los años '50, se lanzó a elevar el nivel cultural de las niñas y mujeres promoviendo, tanto en los alrededores de la hacienda Montefalco como en la residencia universitaria Copenhague en el D.F., clases y cursos de instrucción básica. Ellas y sus familias respondieron con un cariño y respeto enorme por Guadalupe. Se hacía cargo.
Y buscaba comprender a las personas que no coincidían con ella ni en modo de ser ni en modo de pensar llegando incluso a chocar con su temperamento. Sin embargo, esto no era obstáculo para acercarse a ellas, tratarlas con cariño y buscar comprender sus puntos de vista.
Se puede decir que Guadalupe era empática, quizá ella no lo habría llamado así, pero por sus comportamientos lo era. Desde que comenzó a ser directora de la residencia universitaria Zurbarán, proyecto pionero en la España de la posguerra, hasta los puestos de dirección en instituciones académicas diversas, al final de su vida, pasando por el inicio del trabajo del Opus Dei con mujeres en el México de 1950, sacando adelante e impulsado proyectos sociales de envergadura para mujeres en ese país y habiendo formado parte del gobierno central de la Obra, esos comportamientos sostenidos en el tiempo, la convirtieron en una persona humanamente atractiva a las que las demás seguían, en la que confiaban y a la que querían.
Capacidad de escucha
La empatía se desarrolla y se alimenta de una capacidad absolutamente necesaria: la capacidad de escuchar. Los estudiosos identifican esta característica como uno de los comportamientos imprescindibles del que lidera, a cualquier nivel. Es una competencia requerida en muchos empleos y listada como necesaria en muchas ocupaciones. Sin embargo, es una capacidad que requiere trabajo e interés genuino por el otro. Exige que el que escucha esté convencido de que la otra persona puede aportar y, además, implica un recurso escaso y normalmente mal administrado: el tiempo. Guadalupe sabía escuchar, las personas que hablaban con ella se sentían y se sabían escuchadas. Tanto sus reportes como sus pares o jefes. Todos. Sus amigos y conocidos. Guadalupe Gutiérrez, de México, afirma que “sabía siempre escuchar, comprender, (ser) amable y bondadosa, lo mismo si era una campesina, que una universitaria, (que) una señora de la clase social alta”.54 Carmen Puente corrobora: “la recuerdo siempre serena, optimista, infundiend...

Índice

  1. Agradecimientos
  2. Prólogo de Pablo Pérez López
  3. Introducción
  4. Sentido de misión
  5. Autoconocimiento y motivaciones
  6. Sentido del trabajo
  7. La persona del líder
  8. El estilo del líder
  9. Epílogo
  10. Fuentes