Cómo implicar a los estudiantes en el aprendizaje
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Cómo implicar a los estudiantes en el aprendizaje

100 ideas creativas

  1. 136 páginas
  2. Spanish
  3. ePUB (apto para móviles)
  4. Disponible en iOS y Android
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Cómo implicar a los estudiantes en el aprendizaje

100 ideas creativas

Descripción del libro

Ser capaz de conectar con los jóvenes estudiantes, implicándolos e involucrándolos en su aprendizaje, es una de las competencias que más necesita un profesor, pero puede ser también una de las habilidades más difíciles de dominar y de mantener con el paso del tiempo. Docentes de los cinco continentes buscan formas rápidas y sencillas de animar sus clases, probando cosas nuevas y emocionantes, o simplemente innovando y ajustando una práctica o estrategia que llevan haciendo durante años. Este libro está pensado para ayudarles.

Cómo implicar a los estudiantes en el aprendizaje ofrece y desarrolla 100 ideas, fáciles de implementar y llenas de creatividad, a las que se puede acudir para buscar inspiración. Presenta técnicas y actividades para aplicar en cualquier materia, desde la creación de situaciones que invitan a la reflexión hasta el uso de la tecnología de manera innovadora y efectiva. También ofrece numerosas ideas divertidas que ayudarán a conectar con los estudiantes, como personas y no solo como máquinas de superar exámenes.

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Información

ISBN de la versión impresa
9788427726673
ISBN del libro electrónico
9788427726697
XII
Evaluación y feedback
94 Controles regulares de progreso
95 Feedback, mejor que calificación
96 Pre-evaluación
97 Deja que los estudiantes elijan sus propias metas
98 Luces de tráfico
99 Levantad vuestras pizarras o tablets
100 Feedback digital
IDEA 94
Controles regulares de progreso
“Lo estoy haciendo bien”.
Ayuda a los alumnos a llevar un registro y a permanecer implicados brindando oportunidades de manera regular para hacer un control del progreso de modo que puedan monitorizar su propio progreso. Como todo lo que hacemos en la vida, si puedes ver que estás progresando visiblemente hacia tu meta, es mucho más probable que estés motivado para continuar, independientemente de lo difícil que sea.
Si podemos adoptar el hábito de separar nuestras clases en cápsulas más digeribles de aprendizaje (véase Idea 31), entonces esto naturalmente conduce a la oportunidad de brindar a los alumnos de manera regular, oportunidades de monitorear su propio progreso en relación a criterios claros. Cuanto más hagas esto, mejor se les dará a los alumnos ser capaces de puntuar con madurez y precisión su propio progreso.
Para hacer que tus controles del progreso sean efectivos, hay dos principales maneras de realizarlos:
Los alumnos evalúan su progreso en relación a un conjunto claro de criterios de evaluación. Los criterios son conocidos antes de empezar, de manera que los alumnos sepan qué se espera de ellos. Pueden entonces usar una lista de comprobación o una escala natural de colores para ver si han llegado a los elementos individuales de los criterios, o lo lejos que están a la hora de satisfacerlos.
A los alumnos se les brinda una lista de tareas que deben completarse dentro de breves secuencias temporales. Esto les ayuda a tener el trabajo al día durante una clase. Si se mantienen al día con lo que se espera en cada secuencia temporal, ellos saben que van a estar a tiempo de terminar la tarea en el tiempo deseado.
Facilitándoles a los alumnos ser conscientes de lo bien que lo están haciendo, hará que les sea más fácil permanecer implicados en su aprendizaje.
Una vez que los alumnos hayan dominado la capacidad de medir su propio progreso, haz que inicien la evaluación entre pares.
IDEA 95
Feedback, mejor que calificación
“Escuché tu consejo y funcionó”.
Todos sabemos que el feedback es una de las intervenciones más poderosas que podemos usar como profesores, pero ¿es motivador? Si puedes implicar a tus alumnos a través de tu feedback escrito en sus libros, puedes motivarlos para mejorar su trabajo como resultado de tus palabras.
Trucos para asegurar que tu feedback implica a tus alumnos para que deseen mejorar su trabajo:
Usa su nombre. Una vez que usas el nombre de alguien, las palabras instantáneamente se vuelven personales.
Intenta señalar algunas cosas positivas del trabajo de modo que no parezca que solo te estás fijando en los errores.
Identifica algunas áreas clave que sientas que el alumno puede hacer mejor. Sé explícito en cómo podría haber hecho esto mejor. A algunos alumnos les puede ayudar que les brindes un ejemplo.
Fíjale al alumno una oportunidad de practicar esto enseguida, en vez de tener que esperar unas cuantas semanas antes de que tenga de nuevo la oportunidad.
Tus alumnos ya no verán tu feedback como una mera afirmación sentenciosa; en vez de eso estarán esperando leer tus comentarios porque serán una fuente de consejo y motivación para mejorar constantemente.
Idea extra
Se necesita un feedback de alta calidad para implicar al alumno a actuar con base en las palabras que tú escribes, de modo que ellos puedan mejorar su trabajo. Si puedes hacerlo bien, tu feedback puede ser una enorme fuente de motivación y de implicación para tus alumnos.
Intenta eliminar las notas de tu feedback y brinda solo comentarios. Observa que están mucho más atentos a los comentarios cuando quitas la nota.
IDEA 96
Pre-evaluación
“Vamos a ver qué sabes antes de que empecemos”.
Conseguir que los alumnos evalúen su propio conocimiento y habilidades antes de que empiecen un tema nuevo se está volviendo cada vez más común. Dejar que los alumnos vean de dónde parten con cada tema hace que sientan mucho más propio su aprendizaje, y a su vez, les implica en su proceso de aprendizaje.
Una manera simple de hacer esto es brindar una tarea de evaluación o test al principio de cada tema. Esto es muy fácil de establecer y administrar y es útil para el profesor y para los alumnos:
Sabes exactamente qué es lo que los alumnos saben o no saben, cosa que significa que puedes crear unos niveles adecuados de reto para cada grupo.
Puedes evitar desimplicar a tus alumnos repitiendo habilidades y contenido que ya hayan cubierto y en los que ya sean competentes.
Los diferentes alumnos pueden tener significativamente diferentes puntos de partida, cosa que significa que tus estrategias de diferenciación tal vez deban ser creativas e innovadoras.
Los alumnos ganan confianza de hacer bien una actividad de preevaluación. El hecho que ya sepan un poco sobre un nuevo tema puede sugerirles que tal vez lo podrían hacer bastante bien durante las siguientes semanas.
Habiendo visto cuál es su punto de partida, a través de la preevaluación, es muy fácil ver lo lejos que han llegado una vez que el tema termina y tiene lugar una actividad postevaluación.
Los niveles de confianza aumentan significativamente si ellos pueden visibilizar cuánto progreso han hecho desde el inicio del tema hasta el final.
Truco didáctico
Si los alumnos tienen un desempeño bastante bajo en su tarea de preevaluación, diles que no se decepcionen demasiado porque ahora pueden demostrar más progreso que algunos de sus amigos, que tal vez partan de más arriba.
IDEA 97
Deja que los estudiantes elijan sus propias metas
“Asume la responsabilidad de tu propio aprendizaje”.
No siempre tenemos que estar al cargo de nuestras metas de aprendizaje. Dales a los alumnos la oportunidad de fijar sus propias metas y te sorprenderá lo precisos que pueden ser y cómo les hace pensar en dónde están y adónde tienen que llegar.
Los alumnos están acostumbrados a que se les planteen objetivos para todo lo que hacen en la escuela, desde las matemáticas pasando por el comportamiento. Pero, ¿alguna vez te has parado a preguntarles a tus alumnos si ellos estaban de acuerdo con esos objetivos, o si incluso comprenden de dónde han salido? Probablemente todos hemos experimentado una cultura del establecimiento de objetivos, en la que los objetivos no significan nada para nosotros porque no tenemos ni idea de cómo se le han ocurrido a alguien. El objetivo puede parecer inasumible o sencillamente ridiculo.
Tratando de que los alunos sientan como propias sus metas individuales, les estás dando la oportunidad de volverse mucho más responsables y reflexivos y, a la vez, mucho más implicados en su aprendizaje. Si les das la oportunidad de reflexionar sobre su propio rendimiento de vez en cuando, y luego les pides que elaboren en qué deben trabajar o hacer mejor en su siguiente trabajo, tal vez te sorprenda lo precisos y receptivos que son.
Una vez que tus alumnos adopten el hábito de hacer esto, encontrarás mucha más motivación para satisfacer sus objetivos, porque eso es exactamente lo que son: SUS objetivos, y no los de los demás. De repente, empiezas a ver que se apropian de su trabajo, que hay reflexión y propósito en él. También se vuelve mucho más fácil rendirles cuentas, porque se están ciñendo a sus metas, no a las tuyas.
Un paso más
Si te preocupa que tus alumnos no se planteen el suficiente grado de reto con sus propias metas, ¿por qué no revisarlos antes de darles el visto bueno?
IDEA 98
Luces de tráfico
“¿Estás preparado para partir o necesitas disminuir la velocidad?”.
Comprender el progreso que están haciendo tus alumnos a lo largo de la clase es esencial para ayudarte a manejar el ritmo y el nivel de reto. Con...

Índice

  1. Cubierta
  2. Título
  3. Dedicación
  4. Índice
  5. Introducción
  6. I. EL AULA O SALA DE CLASE
  7. II. LOS CONTENIDOS
  8. III. HABILIDADES DE COMUNICACIÓN
  9. IV. GESTIÓN DEL AULA
  10. V. PLANTEAR PREGUNTAS
  11. VI. RETOS Y DIFICULTADES
  12. VII. TECNOLOGÍA DIGITAL
  13. VIII. FLIPPED LEARNING
  14. IX. APRENDIZAJE ACTIVO
  15. X. A LA VISTA DE TODOS
  16. XI. ELOGIOS Y PREMIOS
  17. XII. EVALUACIÓN Y FEEDBACK
  18. Página de créditos