Educación para la paz, la equidad y los valores
eBook - ePub

Educación para la paz, la equidad y los valores

Fernando Barragan Medero, Jolanta Mackwicz, Zofia Szarota, David Pérez-Jorge

Compartir libro
  1. 240 páginas
  2. Spanish
  3. ePUB (apto para móviles)
  4. Disponible en iOS y Android
eBook - ePub

Educación para la paz, la equidad y los valores

Fernando Barragan Medero, Jolanta Mackwicz, Zofia Szarota, David Pérez-Jorge

Detalles del libro
Vista previa del libro
Índice
Citas

Información del libro

La construcción de una cultura de paz es un tema social urgente: se conjuga la necesidad educativa y ética, social y política. Se hace insoportable la violencia y la crueldad de nuestros tiempos, por lo que la injusticia debe ser erradicada por muy difícil que pueda parecer y debe primar el optimismo educativo: el cambio es posible.Nuestra obra es el fruto de la colaboración entre la Universidad Pedagógica de Cracovia (Polonia) y la Universidad de La Laguna (España). Es de interés para cualquier colectivo profesional cuyo objetivo sea erradicar la violencia de todo tipo y la promoción de la cultura de paz: pedagogía, maestras y maestros, psicología, sociología, antropología, oenegés, organismos tanto públicos como privados.Ofrecemos los resultados de investigaciones internacionales sobre cultura de paz y derechos humanos, así como una defensa de la educación inclusiva. La metodología de investigación tanto cuantitativa como cualitativa ofrece, además, modelos de informe –una de las principales carencias en las publicaciones–, así como orientaciones complejas para la evaluación.

Preguntas frecuentes

¿Cómo cancelo mi suscripción?
Simplemente, dirígete a la sección ajustes de la cuenta y haz clic en «Cancelar suscripción». Así de sencillo. Después de cancelar tu suscripción, esta permanecerá activa el tiempo restante que hayas pagado. Obtén más información aquí.
¿Cómo descargo los libros?
Por el momento, todos nuestros libros ePub adaptables a dispositivos móviles se pueden descargar a través de la aplicación. La mayor parte de nuestros PDF también se puede descargar y ya estamos trabajando para que el resto también sea descargable. Obtén más información aquí.
¿En qué se diferencian los planes de precios?
Ambos planes te permiten acceder por completo a la biblioteca y a todas las funciones de Perlego. Las únicas diferencias son el precio y el período de suscripción: con el plan anual ahorrarás en torno a un 30 % en comparación con 12 meses de un plan mensual.
¿Qué es Perlego?
Somos un servicio de suscripción de libros de texto en línea que te permite acceder a toda una biblioteca en línea por menos de lo que cuesta un libro al mes. Con más de un millón de libros sobre más de 1000 categorías, ¡tenemos todo lo que necesitas! Obtén más información aquí.
¿Perlego ofrece la función de texto a voz?
Busca el símbolo de lectura en voz alta en tu próximo libro para ver si puedes escucharlo. La herramienta de lectura en voz alta lee el texto en voz alta por ti, resaltando el texto a medida que se lee. Puedes pausarla, acelerarla y ralentizarla. Obtén más información aquí.
¿Es Educación para la paz, la equidad y los valores un PDF/ePUB en línea?
Sí, puedes acceder a Educación para la paz, la equidad y los valores de Fernando Barragan Medero, Jolanta Mackwicz, Zofia Szarota, David Pérez-Jorge en formato PDF o ePUB, así como a otros libros populares de Pedagogía y Política educativa. Tenemos más de un millón de libros disponibles en nuestro catálogo para que explores.

Información

Año
2021
ISBN
9788418615337
Edición
1
Categoría
Pedagogía
1
Educación sin violencia: Construir una cultura de paz2
FERNANDO BARRAGÁN MEDERO
Una vez establecida la relación opresora,
está inaugurada la violencia.
De ahí que jamás haya sido esta, hasta hoy en la historia, iniciada por los oprimidos. ¿Cómo podrían los oprimidos
dar comienzo a la violencia si ellos son el resultado
de una violencia?
PAULO FREIRE
Educación para el presente sin violencia: Construir una cultura de paz
La violencia de género –también denominada violencia doméstica según los ámbitos culturales y geográficos– es una expresión ilegítima de poder ejercida sobre personas, con una peculiaridad que la diferencia de otras formas de violencia: generalmente es selectiva, es decir, se ejerce mayoritariamente sobre las mujeres, las adolescentes y las niñas. El término ha sido cuestionado o ignorado desde diferentes enfoques teóricos (Tubert, 2014) defendiendo que debería denominarse violencia sexual o violencia sexista cuando se explica como una expresión de la discriminación o desigualdad entre mujeres y hombres. La denominación violencia doméstica alude a un ámbito en que se produce, pero recordemos que también puede expresarse fuera del ámbito privado. Sea cual sea su denominación, lo cierto es que la violencia contra las mujeres, las adolescentes y las niñas es una forma de crueldad humana insoportable e inaceptable, contraria a los derechos humanos (Szarota, 2015), por lo que existe un compromiso ineludible de la educación para erradicarla. Se prefiere el término violencia de género porque se alude a las relaciones de poder y opresión establecidas en la organización social patriarcal como una forma de violencia ejercida contra las mujeres por el hecho de serlo o en las relaciones homosexuales y lésbicas en las que también se está produciendo.
La mejora de las relaciones interpersonales y la gestión de conflictos han implicado la elaboración del denominado ciclo del conflicto. El conflicto implica una confrontación de intereses individuales o sociales cuyo carácter puede ser personal, económico, político. La confrontación significa que existen varias perspectivas posibles ante un fenómeno social, pero que son excluyentes. Los conflictos están presentes en las relaciones interpersonales entre grupos e instituciones como la familia, el Estado y otras organizaciones sociales y requieren destrezas interpersonales y cognitivas que se desarrollan a través del trabajo en equipo (Torres, 2011). La agresividad es la primera respuesta al conflicto como procedimiento de imposición de una perspectiva sobre otras ante la ausencia de habilidades para la negociación o ante la imposibilidad de la misma. La violencia surge cuando se emplea la intimidación, el lenguaje agresivo o discriminatorio o la fuerza física. La violencia atenta directamente contra la integridad personal, física o sexual de una persona o un colectivo.
Existe una diferencia entre problema y conflicto que hemos de clarificar: el primero no implica confrontación de perspectivas excluyentes, el segundo sí. Por ejemplo, un problema es no disponer de dinero para comprar algún objeto; un conflicto es el desacuerdo excluyente entre dos personas respecto a la forma en que hemos de emplear el dinero.
Aunque en ocasiones empleamos los términos agresividad y violencia como sinónimos, la agresividad implica confrontación mientras que la violencia es un atentado contra la voluntad de otra persona o de un colectivo o, como señala Ortega (1998), la violencia es «el uso deshonesto, prepotente y oportunista de poder sobre el contrario, sin estar legitimado para ello» (p. 21).
Tanto la agresividad como la violencia son formas de comportamiento estereotipadas desde la perspectiva de género, es decir, están asociadas a los hombres en la mayor parte de las culturas conocidas, aunque no implica la defensa del supuesto carácter innato de ambas sino una socialización diferencial. La vinculación entre el conflicto y la violencia ha sido expresada por la antropología (Miller, 2011), así como en un excelente ensayo: «El porqué de la guerra», en el que Harris (1995) señala:
Las potencialidades congénitas para la agresividad deben formar parte de la naturaleza humana para que pueda existir cualquier grado de sexismo o de actividad bélica, pero la selección cultural tiene el poder de activar o desactivar estas potencialidades en bruto y las encauza hacia expresiones culturales específicas. (p. 3)
Desde la perspectiva de una ideología patriarcal de la masculinidad, la socialización de género ha implicado, asimismo, contraponer agresividad asociada a los hombres con afectividad asociada a las mujeres. El término violencia de género significa entender la violencia como una expresión ilegítima de poder.
La vinculación entre violencia, poder y masculinidad adquirió una explicación en la construcción de la superioridad de los «hombres de Oxbridge» –se hace referencia al modelo de educación patriarcal y sexista en universidades británicas como Oxford y Cambridge– poniendo énfasis en la heterosociabilidad, que se volvió vital para la formación (Deslandes, 2005) –contínua, como dice Miller (2004, p. 17)– para explicar la violencia de los hombres en la guerra, que es el resultado de la educación: «No es más que un método de entrenamiento sistemático que utiliza ejemplos para mostrarles cómo destruir a los demás» y –desde la visión de la sociología de Newton (1994)– establece un vínculo entre la prisión y las masculinidades.
La falta de una perspectiva de género ha sido señalada por Messerchmidt (1993) en las ciencias jurídicas con el concepto de «criminología ciega al género».
La idea de «hacer género», como ha señalado Krienert (2003), fue introducida por West y Zimmerman en 1987. Conceptualizan el género como el logro de un hábito que se crea y mantiene a través de la interacción diaria. Este argumento identifica la forma en que la expresión de la masculinidad está directamente relacionada con el comportamiento criminal, especialmente el uso de la violencia (Walklate, 1995, p. 172). En lugar de ver la masculinidad como algo que solo sucede a los hombres o se hace a los hombres, la masculinidad se ve como algo que hacen l...

Índice