¡Socorro, quiero ser digital!
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¡Socorro, quiero ser digital!

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¡Socorro, quiero ser digital!

Descripción del libro

Un ordenador en casa conectado a la Red, ¿qué hay de raro en eso? Nada, salvo que es una imagen reciente. En los últimos quince años las cosas han cambiado mucho. Los nativos digitales, que han nacido con un ordenador conectado a Internet debajo del brazo, lo viven con naturalidad. Los demás tenemos que hacer un esfuerzo adicional para entender este universo compuesto por blogs, redes sociales, movilidad, etc. ¿Para qué vale Twitter? ¿Es peligroso subir información a Facebook? ¿Tendré algún beneficio laboral si me doy de alta en LinkedIn? ¿El móvil sirve para algo más que para hacer llamadas? Ser un inmigrante digital no es una excusa para no saber la respuesta. Pero para ser un usuario 2.0 hay que comprender bien las reglas del juego de este nuevo mundo. Solo así podrás navegar sin peligro de naufragar. El poder está en la Red y en ella está el público objetivo al que te diriges, los puestos de trabajo con más futuro, los candidatos perfectos, las mejores ideas profesionales, las ofertas más interesantes. ¿Todavía quieres seguir dándole la espalda?

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Información

Editorial
LID Editorial
Año
2010
ISBN de la versión impresa
9788483562062
Visión General del
universo Web 2.0
01

1. Introducción

Algunos de los que nos dedicamos de manera profesional a las nuevas tecnologías hemos tenido la oportunidad de vivir de cerca la paulatina llegada de Internet a España desde mediados de los años noventa. Fue una etapa inolvidable para todos.
Las grandes empresas, universidades y organismos de investigación fueron los primeros en conectarse. Las velocidades eran bajas (¿recuerdas los módems de 1200 bps?) y el correo electrónico estaba comenzando a establecerse como un nuevo estándar en la comunicación. En ausencia de buscadores como los actuales, los usuarios anotábamos las direcciones Web o utilizábamos servicios como Gopher para localizar la información en la Red.
En los últimos quince años, aproximadamente, muchas cosas han cambiado y ahora vemos con total normalidad tener un ordenador en casa y además conectado a la Red. Todavía es más sorprendente ver la conexión a Internet desde los móviles (sobre todo entre los más jóvenes, que son nativos digitales). Las empresas, hoteles, centros educativos y universidades no se conciben sin ordenadores conectados a Internet tanto para empleados como para huéspedes o alumnos.
Pero no todos hemos asumido los cambios a la misma velocidad. Los nativos digitales que han nacido, no ya con un pan bajo el brazo, sino con un ordenador conectado a Internet, lo viven de otra manera. Los demás tenemos que hacer un esfuerzo adicional para entender esta nueva Internet y el universo que la compone: blogs, redes sociales, movilidad, etc.
Para ser un usuario 2.0 hay que comprender bien las reglas del juego de este nuevo mundo. Este libro pretende ser tu guía en este camino de aprendizaje.

2. La Web 2.0

Quizás la parte más visible de la nueva era de Internet sea la World Wide Web que estamos utilizando desde los primeros años de este siglo. El número de usuarios conectados a Internet ha impulsado una gran cantidad de portales, servicios y aplicaciones que ha atraído a más usuarios y generado así más tecnología, en una espiral que se retroalimenta y permite una rapidísima evolución.
El término Web 2.0 está muy ligado a diversos expertos en Internet asociados a la conocida editorial O’Reilly (www.oreilly.com). Varios de ellos decidieron utilizar este término al preparar unas conferencias en 2004. Querían resaltar el cambio producido respecto a la etapa anterior de Internet (http://es.wikipedia.org/wiki/Web_2.0).

2.1. Entonces, ¿cuál era la Web 1.0?

Los usuarios más jóvenes no comprenden en realidad la razón de llamar a este grupo de tecnologías y servicios Web 2.0. Para ellos se trata de la Internet que han conocido y no ha cambiado desde entonces.
Conviene recordar algunos factores que la diferencian con claridad de la generación anterior. La filosofía original era unidireccional: los grandes portales, las páginas Web de empresas generaban información y los usuarios simplemente la buscaban. La información fluía de las empresas, corporaciones, periódicos o sistemas de información hacia el público general. A esto le añadimos que el acceso a Internet era un lujo al alcance de unos pocos. Dependía de la zona geográfica, se consideraba caro y lento, el ancho de banda no era un servicio universal (en muchas áreas las velocidades de acceso resultaban demasiado bajas) y, desde luego, la movilidad tenía unas funcionalidades de acce so muy limitadas y costosas (WAP, en esencia, una tecnología para utilizar páginas Web muy sencillas y con páginas estáticas). Surgieron con timidez los primeros foros de usuarios (para participar tenías que haber adquirido algunos conocimientos de informática). En los setenta y ochenta se popularizaron los BBS (del inglés Bulletin Board Systems, un sistema de boletines a los que los usuarios accedían por módems telefónicos). Surgieron los primeros buscadores de información. Éstos eran muy sectoriales y sus bases de datos difíciles de mantener al día.
No existían ni las palabras clave ni las etiquetas, con lo que las búsquedas eran muy arduas y tenías que saber con exactitud lo que querías encontrar. Los usuarios no podíamos participar en la Web de forma activa, sólo pasivamente. En Estados Unidos aparecieron las páginas personales que fueron las precursoras de los blogs actuales.
¡Parece increíble que, en estos últimos años, el escenario haya variado tanto!

2.2. Comprendamos el paso a la Web 2.0

A la hora de entender la Web 2.0 vamos a describir el escenario para reconocer los factores que la impulsaron:

2.2.1. Personas

Tras unos diez años de experiencia, en Estados Unidos y en Europa se concentraron colectivos de internautas que empezaban a demandar mayores y mejores herramientas para navegar por esa red que ya controlaban. Los países asiáticos que, aunque parten de un nivel tecnológico inferior, se incorporan de manera masiva a Internet con una velocidad de vértigo y una capacidad de adopción de nuevas tecnologías verdaderamente sorprendente que adelanta al resto de países ocupando los primeros puestos. En este enjambre de usuarios donde los clásicos se mezclan con los digitales, se crea el espacio adecuado para que surjan un sinfín de iniciativas y tecnologías bajo la bandera de facilidad de uso.

2.2.2. Tecnología

Las empresas de telecomunicaciones en todo el planeta invierten en la tecnología de banda ancha y despliegan sus autopistas virtuales sobre las que se puede navegar desde cualquier ordenador y con mayor capacidad. En España el ADSL supuso el gran salto. La ventaja de la capacidad permite ir añadiendo contenido a la Red. Al principio enviábamos correos electrónicos sólo de texto. Luego pudimos incorporar documentos. Después vino la música, las fotos y los vídeos. Los buzones de correo fueron aumentando su capacidad de almacenamiento a la vez que lo hacía el ancho de banda de las comunicaciones. Ahora podemos ver y descargar películas completas desde la Red.
La evolución en las comunicaciones móviles y las redes inalámbricas facilitaron que nos pudiéramos conectar desde cualquier dispositivo, portátil, teléfono móvil o PDA. Ampliábamos la conexión a Internet hasta los teléfonos con lo que aumenta de forma drástica la presencia de los usuarios en la Red puesto que ya nos podemos conectar desde cualquier sitio y cualquier hora.

2.2.3. Contenidos

El nacimiento de los buscadores Google o YouTube dio a Internet una potencia hasta entonces desconocida. Los grandes fabricantes de programas informáticos aprenden a convivir con empresas de código abierto y libre. El abaratamiento del precio de los ordenadores y los dispositivos lo populariza. Esto facilita la aparición de muchas aplicaciones cada vez más útiles, más fáciles de manejar y más baratas. Las comunidades técnicas de desarrolladores son las primeras que entienden el nuevo modelo y comparten sus códigos con colegas de otros países para enriquecerlos. Aprovechan la potencia de la Red para comunicarse con otros, compartir, resolver problemas técnicos, añadir funcionalidades a sus aplicativos y un sinfín de ventajas más.
Cuadro 1.1 Esquema de factores que propiciaron la nueva Web (2.0)

2.3. Los usuarios al poder

Uno de los cambios más importantes que ha sufrido Internet en estos años (y su principal reflejo ha sido la Web 2.0) es que los usuarios, como colectivo, han tomado el poder en cuanto a la creación y difusión de la información.
Ya hemos visto que en los primeros tiempos de Internet, las grandes empresas −sobre todo las tecnológicas y los buscadores− se consideraban los principales protagonistas de Internet. Las páginas personales o de pequeñas empresas eran minoritarias y la información no estaba muy clasificada (etiquetada, en realidad). Por ello, la mayoría de la información interesante se encontraba sobre todo en los grandes portales y los usuarios jugaban un papel más bien pasivo en todo el sistema. Cuando entrabas en Internet tenías que saber exactamente la dirección de la página Web a la que necesitabas acceder. Además no resultaban nada fáciles de recordar.
En esta nueva generación Web, los usuarios, todos y cada uno de nosotros, podemos crear información, referenciar la de otros, comentarla y difundirla por medio de multitud de servicios, la mayoría de ellos gratuitos o de muy bajo coste.
Con la debida habilidad, cualquier usuario de Internet hoy en día puede ser una estrella digital y recibir millones de visitas. Seguro que recordamos algún vídeo casero o alguna foto graciosa que ha llegado a nuestros ordenadores y a los de nuestros conocidos en muy breve espacio de tiempo. O bien un artículo de denuncia bien escrito por un ciudadano de a pie. No es necesario desarrollar una página Web compleja, ni utilizar una infraestructura informática de alto potencial, ni siquiera es necesario ser un experto en nuevas tecnologías. Si tienes algo que decir y sabes cómo decirlo, puedes tener una gran repercusión a lo largo y ancho de Internet.
A través del contenido de este libro podremos comprobar cómo ser un usuario 2.0 sin emplear demasiado tiempo y con unos claros y rápidos beneficios para nuestra vida en Internet.
Cuadro 1.2 Ciclo de la vida básico de un usuario de la Web 2.0

2.4. Etiqueta tu mundo 2.0

Entre los pilares de la evolución de la Web 2.0, uno de los principales ha sido el del desarrollo generalizado de un sistema de etiquetas universal (tag). Al etiquetar una información lo que estamos haciendo es ordenarla por categorías y de esa manera facilitamos enormemente su localización y búsqueda. A esto le añadimos que el sistema es universal, es decir, que son los mismos patrones utilizados en todas las páginas de Internet en el mundo. Este sistema permite asociar una serie de palabras clave a un grupo de datos, ficheros, comentarios, vídeos, fotos o correos de tal forma que podamos realizar todo tipo de búsquedas con este dato.
Imaginemos por un momento que en nuestro mapa mental de amigos y conocidos pudiéramos pegar una pequeña nota amarilla junto a su nombre. En esa nota escribiríamos palabras que nos recordaran datos como: ¿es un miembro de mi familia? ¿Es o ha sido compañero de estudios? ¿Hemos trabajado juntos?, etc. De esta forma, si en el futuro queremos pensar a qué personas invitar a una cena de antiguos alumnos, nuestra mente nos llevará a aquellos en los que la palabra clave sea universidad, por ejemplo.
De igual manera, en este entorno Web, toda la información que ma nejamos puede y debe ser etiquetada: así podremos localizarla y recordarla con más facilidad.
En los capítulos siguientes veremos la utilidad de las etiquetas propias y ajenas en este mundo 2.0. En fotos o vídeos, en documentos o enlaces Web favoritos, en posts en los blogs en los que participen y −en general− en todo lo que los internautas consideren de posible interés para los demás. Si cada usuario de la Web 2.0 colabora etiquetando su información (la que crea o la que ref...

Índice

  1. Prólogo de Francisco Román
  2. Agradecimientos
  3. Introducción
  4. 1. Visión General del universo Web 2.0
  5. 2. Las redes sociales de ocio
  6. 3. Facebook, el éxito de las redes sociales de ocio
  7. 4. Redes sociales para uso profesional
  8. 5. LinkedIn
  9. 6. El universo Twitter
  10. 7. Tu imagen en Internet
  11. 8. El mundo móvil
  12. Anexo
  13. Notas
  14. Glosario
  15. Índice de cuadros