Luis Nacht
México, Argentina – saxo tenor
Luis, ¿puedes contarnos brevemente tu carrera musical?
Comencé con la música de niño. A los diecisiete años, en México, comencé a estudiar seriamente la flauta, y a los veintitrés el saxofón. Toqué en grupos folklóricos y de música latina. De regreso a la Argentina (1985) me volqué al estudio del jazz y la improvisación. Luego de veinticinco años toqué y estudié con grandes músicos. Tengo cinco discos grabados como líder y muchos como sideman. Viajo con mi cuarteto por América y Europa regularmente, en giras, festivales, teatros y clubs de jazz.
¿Qué recuerdos te han quedado de tu experiencia con el disco En las nubes?
Es el tercer disco que grabo con los mismos músicos de mi cuarteto y cada vez es más fluido el entendimiento. Creo que se plasma en el resultado de la grabación.
¿Cuáles son los mejores discos de jazz que has escuchado en tu vida? ¿Y los mejores álbumes de jazz latino?
No escucho jazz latino, y creo que A Love Supreme, Coltrane Legacy, Jimmy Giufre Trio, Adam’s Apple, y tantos otros.
¿Para ti, Luis, tu música es jazz, o latin-jazz, o Argentinian-jazz?
Una especie de jazz con muchas influencias.
Luis, como músico, ¿qué es el jazz?
Para mí el jazz es el afroamericano, y todo lo demás es algo alrededor, donde hay libertades de improvisar y aparece la personalidad de cada músico.
¿Qué solistas son los que más te han influenciado y los que en general prefieres?
John Coltrane, Joe Henderson y Wayne Shorter.
¿Existe una identidad propia del jazz latinoamericano?
No lo sé.
¿Cómo fue la dictadura de Videla y de Galtieri respecto al jazz? ¿Existía una censura?
Durante la dictadura se aniquiló a la parte más creativa de la juventud. Esto afectó a todas las artes, y en el jazz se nota en la ausencia de una generación de músicos. Yo, por ejemplo, estuve exiliado en esos años y hoy todos mis colegas tienen diez o veinte años menos que yo.
¿Existen jóvenes jazzistas en Latinoamérica que merezcan atención también en el resto de Europa y del mundo?
Por supuesto, y hay muchos y muy creativos.
¿Nos podrías hablar de tus actuales proyectos para el presente y el futuro?
En el mes de noviembre del 2010 estaré de gira con mi cuarteto por Europa presentando mi disco En las nubes.
Calixto Oviedo
Cuba – batería y percusión
Calixto, ¿puedes contarnos brevemente tu carrera musical?
Mi carrera la comencé desde muy pequeño, tocando ya a los cuatro años con músicos importantes como Rubén González, El Guajiro Mirabal, en la orquesta del Cabaret Parisien del Hotel Nacional, y la radio y la TV. Comencé los estudios musicales a los ocho años, me gradué de baterista y percusionista, y de ahí hasta hoy he trabajado en casi todo el mundo en los festivales de jazz más importantes, en galas, conciertos y teatros. He tocado en las mejores bandas cubanas y con los más grandes músicos a nivel mundial, Gonzalo Rubalcaba, Danilo Pérez, David Sánchez, Ray Barreto, Giosvani Hidalgo, Horacio «el Negro» Hernández, Luis Conte, Tata Guines, Paquito D’Rivera, y muchos más, además de hacer más de setenta grabaciones hasta el día de hoy.
¿Qué recuerdos tienes de tu experiencia italiana con Gingembre Band?
Una de las últimas fue el disco con Maurizio Brunod (guitarra). Fue una experiencia muy «grande» tocar con grandes músicos del jazz italiano, y sobretodo mantener mi estilo latino en el jazz, cosa que así me lo pidió Maurizio. Fue genial y el disco creo que es muy bueno, y se ha trabajado poco con él.
¿Para ti, Calixto, tu música es jazz, o latin-jazz, o Cuban-jazz?
Me gustan todos los estilos, ya que también toco pop con una banda sueca, pero mi estilo preferido es el «jazz cubano», que es el verdadero latin-jazz según los grandes maestros de la música a nivel mundial.
Calixto, como músico, ¿qué es el jazz?
El jazz es la forma o estilo de expresar el sentimiento y la música de siempre.
¿Crees justo hablar del jazz como de una forma de arte contemporáneo?
¡No, no es arte contemporáneo! ¡Así lo creo!
¿Qué percusionistas o baterías son los que más te han influenciado y los que en general prefieres?
Los bateristas que más me han influenciado son Ignacio Berroa, Guillermo Barreto, Vinnie Colaiuta, Steve Gadd y José Luís Quintana «Changuito».
¿Eres amigo de Gonzalo Rubalcaba?
Tengo el placer de conocer a Gonzalo desde niño, además de tocar junto a él, y también de compartir y conocer personalmente a Hernán López Nuza, Bobby Carcaces, Arturo Sandoval (trabajé en su banda en Cuba, aunque poco tiempo), Chucho Valdés, Bebo Valdés, y una lista interminable de músicos, los cuales estudiamos en la Escuela Nacional de Arte y después trabajamos juntos, como el caso de Adalberto Álvarez, José Luis Cortés «el Tosco» (Adalberto Álvarez y su son, Ng Labanda), donde toqué durante siete y seis años, Isaac Delgado... En fin, creo que a casi todos.
¿Existe una identidad propia del jazz de Cuba?
Sí, creo que en Cuba existe una identidad. Lo escuchamos en la manera de tocar que tenía Emiliano Salvador o en los pioneros del jazz cubano, como son los casos de Pedro Juztiz «Peruchín», Frank Emilio Flynn, Mario Bauza, Chucho Valdés con su quinteto de jazz, o en los amigos Quinteto de Jazz Cubano de los años 50.
¿Cómo fue la dictadura de Batista respecto al jazz? ¿Existía una censura o un desprecio hacia la música de los negros?
Verdaderamente no recuerdo bien si en los años de Fulgencio Batista pasó eso, pero en Cuba en esa época se tocaba de todo y no creo que había racismo musical, ya que en los night-clubs, en los casinos, se tocaba todo tipo de género.
¿Cuál es la situación actual del jazz en la isla de Cuba?
El jazz en Cuba tiene un gran movimiento y hay grandes músicos, y muy jóvenes por cierto, tocando muy pero muy bien, aunque la atención es mínima.
¿Y la música en Cuba?
En este momento de boom del regetón, es lo que más se escucha en Cuba, aparte que la radiodifusión es pésima. Y no se le da promoción a todos. La identidad está un poco lejos del gusto que se ha impuesto en Cuba.
¿Hay jóvenes jazzistas en Cuba y en Latinoamérica que merezcan atención también en el resto de Europa y del mundo?
Sí, creo que hay músicos de jazz en Cuba y América Latina que necesitan que se conozcan en el mundo.
¿Nos podrías hablar, Calixto, de tus actuales proyectos para el presente y el futuro?
Los conciertos que me quedan con mi quinteto y trío de jazz cubano, o jazz latino, como así se anuncian aquí en Europa, las giras con Afro-Cuban All Stars por Malasia, Singapur y Canadá para lo que queda de año, la grabación de un programa de TV en La Habana con mi hijo Yulien, «otro genio» de la percusión en Cuba, y mi segundo disco de jazz latino, que espero tenerlo listo en diciembre o a principios del 2010, ya que tengo muchos compromisos internacionales que cumplir y son varios proyectos, incluyendo este de «Mauri» (Brunod) del cual estoy muy feliz. Además, el 30 de agosto tocamos en el festival «Musica sulle Bocche» en Cerdeña. Y el 2011, seguir pidiéndole a Dios salud y mucho, pero mucho trabajo.